Experiencias de los pacientes

Cuando hablé por primera vez con su representante (Danelle), tenía mis sospechas y estaba a la defensiva. Estaba realmente abrumada con mis diversas situaciones hasta el punto de que estaban afectando mi salud física y emocional. Cuando Erica entró en la conversación, acepté permitirle que procediera a solicitar asistencia, sin esperar nunca que nada se materializara. Ella conocía los detalles y actuó de inmediato y con una preocupación genuina. Sentí que debía estar tratando con alguien que me veía como su abuela y quería que todos los recursos se centraran en mí. No tenía idea de las opciones que ella ofrecía. Me dio instrucciones claras, explícitas y directas y me guió a través de cada paso desde la solicitud hasta los formularios necesarios, con la urgencia de hacer las cosas rápidamente. Nunca podré expresar lo agradecida que estoy con ella y su colega por brindarme esta atención inesperada. Sentirme pequeña e intrascendente, abandonada y sola en una oscuridad que cambió mi vida fue abrumador, y luego hubo una luz tranquilizadora que se hizo más brillante con cada conversación. ¡Erica fue tranquilizadora, cálida, comprensiva e increíblemente servicial! Fue como si hubiera nacido para guiar a la gente hacia la asistencia. Estos empleados son unas joyas y dicen muchísimo sobre MCR y su personal. Gracias es lo mejor que puedo ofrecer, aunque siento que debo mucho más.